En los últimos días hemos escuchado algunos titulares que nos han disuadido como ahorradores e inversores. Los precios no paran de subir y los bancos centrales están haciendo lo que sea para parar esa espiral que amenaza con destruir nuestro poder adquisitivo. Eso se ha traducido en que los mercados de bonos han evidenciado riesgos importantes. Sin embargo, los expertos de Allianz Global Investors nos confirman que también hay oportunidades de inversión pensando en el largo plazo.
No todos los bancos centrales están actuando en sincronía. Desde Alemania hasta Brasil y desde Reino Unido hasta China, las economías se mueven a diferentes velocidades a medida que la política monetaria y el crecimiento comienzan a divergir a raíz de la agitación creada por la pandemia de la COVID-19.
Ahora estamos viendo una divergencia en la determinación de los bancos centrales a la hora de endurecer su política monetaria para reducir la inflación a expensas del crecimiento económico y el empleo. La división está creando problemas, pero también un momento único para aquellos inversores dispuestos a ser flexibles, así como a buscar posibles activos con los que proteger nuestro dinero.
En el mercado de bonos se está viendo un contraste importante entre diferentes regiones con el paso del tiempo. Solo hay que ver los activos brasileños o los españoles en el mismo mercado. Son la noche y el día. Esta imagen mixta sugiere que las economías y las políticas se están desincronizando profundamente con respecto a cómo y cuándo podrían salir del régimen actual impulsado por la inflación.
En un entorno tan cambiante, la gestión activa y profesional, con un buen control de los riesgos y mucha flexibilidad en la asignación de activos ofrecen valor a los inversores conservadores. Una solución de inversión dinámica y multi activo puede ser una solución para los inversores más cautos. Comprueba cuál es tu perfil de inversor y qué solución se adapta a tus necesidades.
Invertir ante la divergencia
Una recesión más profunda en la zona euro que tiene más probabilidad y magnitud que en economías ricas en energía como Estados Unidos y Canadá, donde las posibilidades de controlar la inflación sin un aterrizaje forzoso pueden parecer mejores.
La diferencia se debe en gran parte a la enorme dependencia de Europa del suministro de gas natural de Rusia, que podría interrumpirse unilateralmente durante un período prolongado debido a las tensiones geopolíticas que rodean la guerra en Ucrania. Los tipos reales de la zona euro siguen siendo profundamente negativos, ya que el Banco Central Europeo ha tardado más en subir los tipos que la Reserva Federal, incluso cuando las cifras de inflación anual de la región superaron a las estadounidenses.
Entonces, ¿dónde invertir en este mundo divergente?
El conjunto de oportunidades para las estrategias de bonos flexibles se ha visto enormemente enriquecida por este régimen impulsado por la inflación, especialmente para aquellos que pueden beneficiarse de posiciones de valor relativo entre países en todo el espectro de duración y curva de tipos, así como de exposiciones selectas a la inflación.
Dado que muchos inversores ya están muy infraponderados en la duración de los bonos, podría tener sentido comenzar a asignar de forma incremental a aquellos mercados de tipos que tienen más probabilidades de beneficiarse de la fuga hacia la seguridad, porque ya han cotizado los peores escenarios.
Pocos parecen creer que acabaremos con un escenario de estanflación (inflación elevada con recesión económica). Pero el rango de resultados plausibles aún no es lo suficientemente estrecho como para excluir esa posibilidad, ni para asegurar solo recesiones superficiales en lugar de los aterrizajes más duros. Leer los signos divergentes entre países es una buena manera de anticipar lo que sucederá. Solo cabe ser lo más avispado posible frente a este clima. Si tienes dudas sobre cómo empezar a actuar o sobre qué tipo de estrategia se adecua mejor a tu perfil, contacta con un asesor profesional.